El Cartagena Jazz Festival concluye su edición con más público

Bugge Wesseltoft y Diane Schuur cerraron el sábado un festival por el que han pasado más de seis mil personas

El pasado sábado 22 de noviembre concluyó con las actuaciones de Bugge Wesseltoft y Diane Schuur la 28ª edición del Cartagena Jazz Festival. Un año donde el público ha roto las previsiones de la organización, ya que se han acercado más de seis mil personas al Nuevo Teatro Circo, sede del festival, siendo por lo tanto, la edición que más espectadores han asistido.

Y es que cinco de las ocho noches se colgaron el cartel de no quedan entradas. Matthew Herbert y Danilo Pérez, Omara Portuondo y Jose James, Lizz Wright e Incógnito, Bebo y Chucho Valdés, Perico Sambeat y Joe Bonamassa fueron las noches donde se agotó el papel.

La revelación del festival fue Jose James, que acaba de publicar su disco en España, y que será sin duda dentro de unos años una gran figura dentro de los circuitos jazzeros. El público quedó también epatado con la fuerza que todavía derrocha Omara Portuondo, a la que dieron la ovación más sentida del festival, pero la artista que más interés despertó por parte del público y de los medios de comunicación fue Lizz Wright.

El festival, como sigue siendo habitual, tuvo muy buena respuesta en los medios de comunicación nacionales con apariciones en los Informativos Telecinco, en el Telediario de la 1ª de TVE, en diarios como El País, El Mundo, La Razón, ABC y Público, en revistas culturales como Babelia o El Cultural y en espacios radiofónicos de las principales cadenas nacionales como la Ser, que dedicó un gran espacio en Hora 25 de Angels Barceló, o en Onda Cero con Te doy mi palabra de Isabel Gemio.

Mención especial a Radio 3, que sigue apostando por el Cartagena Jazz Festival, dando conocimiento de su programación en distintos programas de la cadena pública, y acercando al público los conciertos de Jose James y Omara Portuondo, que fueron grabados en el festival para su posterior emisión a nivel nacional.

El próximo año se celebrará la 29ª edición, y como sigue siendo habitual, el festival será un espacio abierto a los sonidos, donde la heterodoxia y la ortodoxia del jazz se darán la mano.

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