La exposición Peces del murciano Pedro Cano continuará en la sala de exposiciones temporales del Museo del Teatro Romano hasta el 15 de febrero. Además, para cerrar la muestra el sábado 13 de febrero a las 10:30 horas de la mañana el pintor realizará una visita guiada y un taller titulado Pintando Peces con Pedro Cano. Primero se verá la exposición de la mano del artista y, a continuación, se impartirá el taller de pintura cuyo protagonista serán los peces. El taller está abierto a niños y será necesario traer papel de acuarela, un soporte rígido para apoyar, acuarela y pinceles. Para ampliar la información sobre el curso y hacer la reserva del mismo los interesados se pueden dirigir al número de teléfono 968504802.
La muestra recoge el último ciclo pictórico de Pedro Cano, inspirado en las criaturas del mar, 24 tipos de peces que nos sumergen en las aguas el mediterráneo, en las artes de los hombres del mar y en la propia experiencia vital del autor. Dice Pedro Cano que el olor del pescado fue uno de los primeros que debió sentir cuando su padre, volviendo de la plaza después de la venta en el puesto de pescado y salazones familiar, con las manos aún con escamas, se acercaba a darle un beso.
LOS PECES EN NUESTRA CULTURA
La exposición surge de una vinculación del pintor con el mar y sus frutos, pero también con los mercados, los pescadores y sus redes. La palabra Peces que da nombre a la muestra simboliza para los primeros cristianos las cinco letras que identificaban la inicial del nombre y de los títulos del Señor: Jesús, Cristo, Dios, Hijo, Salvador. Así cuando mostraban el dibujo ya estaban confesando la fe que les sostenía.
Dice José Manuel Lorca Planes, obispo de la Diócesis de Cartagena, que los peces con su singular belleza y delicadas formas, su carácter tímido y huidizo seducen a la curiosa mirada hasta esfumarse en el encanto de sus culebrinas. De esta forma, los peces de Pedro pintados con delicadeza, ternura, simplicidad y embrujo, te envuelven cuando contemplas la obra, su trazo firme, los preciosos colores y los espacios en banco te introducen en el mágico mundo marino, gracias a la maestría del pintor.
El mar Mediterráneo fue vehículo de culturas que han dejado su impronta a lo largo de la historia enCartagena, pero también somos herederos de una cultura ancestral en las artes de pesca y los salazones, un legado que tiene su sello particular en la gastronomía de nuestra ciudad. Dice Plinio que el garum más cotizado se obtenía del pex escombro en las pesquerías de Carthago Spartaria. Pedro Cano, heredero de esta cultura mediterránea, nos trae con sus acuarelas esta riqueza marina convertida ahora en un precioso acuario de arte.
