Sanidad probará un nuevo producto repelente para alejar a las gaviotas

El Ayuntamiento pone hoy en marcha la campaña de control de estas aves que durará hasta junio y que, una vez más, confía en la colaboración ciudadana como apoyo fundamental 

Por quinto año consecutivo, el Ayuntamiento de Cartagena, a través de la Concejalía de Sanidad, ha puesto en marcha la Campaña de Control de la Población de Gaviotas, dirigida a frenar la colonización de la gaviota patiamarilla incidiendo en los nidos durante la época de puesta de huevos, campaña que comienza hoy y se extenderá hasta el 30 de junio.

 

El concejal de Sanidad, Nicolás Ángel Bernal, destacaba en la presentación de esta actuación el hecho de que se ha conseguido que la población de gaviotas no aumente, cumpliendo el objetivo de atajar el problema antes de que se convierta en una plaga, ya que sin este trabajo que realizamos, se habría duplicado el número de ejemplares.

 

En cuanto a los datos de la campaña de 2011, en los 178 puntos revisados, se encontraron 94 nidos, de los que se retiraron 99 polluelos y se pincharon 83 huevos.

 

La jefa de Promoción de Salud y Laboratorio Municipal, María José Hernández, y el biólogo de la empresa responsable del control de las aves, José Morales, anunciaban durante la presentación que este año, como novedad y a modo de prueba, se aplicará un producto químico que actúa como repelente con el que se impregnarán las zonas de reincidencia para evitar que la gaviota asiente su nido.

 

El producto, a base de oleorresinas, no daña a las aves, y se utiliza por primera vez en Cartagena a la vez que en otros municipios.

 

En cuanto a la técnica empleada, continúa siendo el pinchado de huevos y retirada posterior del nido, así como la retirada de polluelos.

 

La Concejalía de Sanidad se difundirá la campaña a través de la web municipal y mediante el buzoneo en las zonas comprendidas entre las calles Reina Victoria y Paseo Alfonso XIII (ambas inclusive) y Santa Lucía y el Sector Estación, con la idea de que todos aquellos ciudadanos que localicen algún nido, ya sea en su azotea o en la de algún edificio vecino, lo comuniquen lo antes posible, de forma que se puedan identificar las zonas y se pueda actuar en consecuencia.

 

Por medio de un díptico, se darán a conocer las medidas preventivas y pautas hacia los ciudadanos para controlar el asentamiento de la población y evitar el efecto reclamo, como son no tirar comida en parque y plazas, no dar de comer a las gaviotas, cerrar los contenedores cuando se utilicen y poner obstáculos en las azoteas donde se hubieran observado nidos otros años.

 

Las notificaciones se pueden hacer bien por teléfono, llamando a la Concejalía de Sanidad al 968 12 88 71, o por e-mail: sanidad@ayto-cartagena.es  

 

NUEVO CENSO DE PALOMAS

 

Con respecto a la población de palomas, Nicolás Ángel Bernal señalaba un descenso en el número de capturas, que pasó de 3.709 en 2010 a 2.543 en 2011.

 

Los datos revelan que el número de ejemplares se ha estabilizado desde el último censo de palomas, realizado en 2005, y ya se está trabajando en la elaboración de un nuevo censo para poder contabilizar el número de parejas tanto en el casco urbano como en la periferia.

 

MOSQUITOS QUE NO PICAN

 

El concejal de Sanidad ha lanzado un mensaje de tranquilidad sobre la supuesta plaga de mosquitos que se ha generado en la Rambla de Benipila y que ha llegado hasta algunas calles del casco, como la calle del Carmen.

 

Nicolás Ángel Bernal aseguraba que no son los mosquitos habituales, sino una especie de insecto de aspecto parecido, conocida como quironómido, que ni pica ni ataca a las personas, aunque se está trabajando desde enero, con en torno a cinco intervenciones al mes con larvicidas en la Rambla,  para atajar este problema.

 

Además, el edil tiene previsto convocar una reunión con Acuamed y la Confederación Hidrográfica del Segura, para tratar de dar solución a lo que parece ser el origen de esta plaga, que es el agua que la empresa está vertiendo en la Rambla por las obras de construcción del Pozo de Tormentas en el Barrio de la Concepción, y que queda estancada, propiciando la reproducción de los insectos. 

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